La infraestructura edilicia del Cosmos (I)

Estamos sujetos a comprender nuestra realidad por aquello que percibimos sobre lo que nos rodea; los lectores habituados a esta colección comprenderán empero que esta percepción es miope y eventualmente ciega para todo lo que trasciende la realidad física. Hemos hecho nuestro esfuerzo al presentar un modelo expandido sobre la biología del alma, entendida como un organismo basado en materia no bariónica, el cual podría oficiar como una interfaz plásmica con el sistema nervioso central.

De ser este paradigma una aproximación válida, explicaría la existencia de los complejos autónomos psicológicos como entidades biológicas en un soporte diferente de materia —cuya denominación esotérica seria el sustrato etérico o materia astral— pero susceptibles de poseer niveles de consciencia semejantes o superiores al de los humanos. El libro War in Heaven (La Guerra en el Cielo) propone una disección del plano sutil negativo formado por dos facciones manipulando según sus intereses a la humanidad: los Teócratas (que hemos identificado con los directores de las egrégoras de las religiones organizadas) y el Colegio invisible (relacionados quizá con los grupos sectarios y movimientos sociales contraculturales); en el capítulo XI se hace una descripción de los Bandas de los Teócratas, que reviste grandes similitudes con los anillos que rodean el plano etérico terrestre descritos por Robert Monroe:
Muchos notables tiranos, conquistadores, supinos líderes religiosos, magos negros, y criminales se han convertido en Teócratas después de la muerte, pero también lo han hecho algunas personas que la historia llama santos o genios. El poder corrompe, y la perspectiva de alcanzar la inmortalidad corrompe aún más. Muchas personas con almas altamente desarrolladas, cuyas vidas terrenales fueron vividas con bastante ética optaron por convertirse en Teócratas después de la muerte.
Esto ha sido especialmente cierto en las personas que eran devotos religiosos, pero que luego se enteraron de la horrible verdad acerca de sus dioses después de la muerte. Cuando fueron demasiado poderosos para que los Teócratas los esclavizaran o devoraran, algunos se convirtieron en miembros del Colegio Invisible y lucharon contra la teocracia; pero otros se convirtieron ellos mismos en Teócratas. La tentación es muy fuerte, debido a que los Teócratas, como clase dirigente, han gobernado el plano físico de la Tierra y su plano astral durante la mayor parte de la historia humana. Por ejemplo, la mayoría de los Papas medievales y otros líderes religiosos notorios por ser cínicos y hambrientos de poder son ahora Teócratas.
Kyle Griffith, autor del mencionado libro, logró el contacto con el Colegio invisible a través de rituales claramente enfocados en un negociado energético de tipo sexual, y lo remarcamos pues entendemos que la información suministrada es por lo menos tendenciosa, no tanto por la descripción de los Teócratas, sino porque desestima la existencia del bando positivo de servicio al prójimo o las densidades espirituales; hemos de recordar que las entidades negativas debido a su compulsión al pensamiento ilusorio, sólo pueden ver lo que eligen ver. Por supuesto, el contacto con ciertas inteligencias exosomáticas superiores implica un diferencial de consciencia que dista exponencialmente de la visión humana, a veces con un giro radical aunque no carentes de cierto humor: (1)
P: (Laura) Bueno, ¿hay algún karma negativo en la sociedad, en el juez o el jurado, o en el verdugo, si un criminal es llevado a juicio, declarado culpable de un crimen atroz y luego condenado a muerte?
R: ¿Qué pasa con la guerra? ¿Qué es mejor? Esto es amplio porque todos [los seres humanos] son asesinos y suicidas. Es la suprema lección que todos deben aprender antes de poder pasar a la existencia etérea. Su pensamiento está demasiado simplificado.
¿Tal vez se dude que la orientación humana sea entrópica? ¿Su forma de procurarse alimento acaso no implica la destrucción de otro organismo viviente? ¿Refutaría por casualidad que el hado por encarnar y nacer no es otro que la muerte? Sin embargo, son hechos objetivos que por impotencia o por falta de un punto de vista no antropocéntrico, intentamos denodadamente huir o rechazar con palabras bonitas. Creemos no obstante, que la valentía de aceptarlos es la campana de largada para un cambio, tal vez de proporciones cósmicas.

Un incisivo acercamiento crítico a las canalizaciones —entendiendo que siempre serán tendenciosas y contendrán desinformación— puede ser uno de los pocos caminos para observar con mayor objetividad nuestros viciados conceptos de la realidad física. Pero del mismo modo, el hylerrealismo bungeano o la docilidad ciega y carente de cuestionamientos puede ser la peor prisión que anquilose y entorpezca el desarrollo y crecimiento interior.

Si agregamos el Seth Material provisto por Jane Roberts y Robert Butts junto a las antiguas Transcripciones Cassiopaea, tenemos tres fuentes diferentes que hacen mención a ciertos enlaces estructurales que facilitan el intercambio entre densidades; en War in Heaven, encontramos en el capítulo X una nimia exposición:
P: ¿Cómo funciona la psicokinesis entonces, o no existe en absoluto?
R: Existe, pero no es nada de lo que piensas ahora. De hecho, el concepto que tienen de la naturaleza de los poderes psíquicos es un revoltijo de simplificaciones y errores. La
psicokinesis no mueve ni cambia la materia física directamente, pero puede hacerlo trabajando a través de los vínculos entre la materia física y astral. Estos enlaces son el "secreto de la vida."
Si bien es la única mención que se efectúa en estas canalizaciones sobre los vínculos inter-materiales, en las siguientes páginas se los relaciona con la diferencia entre materia orgánica e inorgánica: la materia orgánica poseería una componente compleja en el plano astral donde el invisible cablerio energético enlazaría el sustrato corpuscular con el inmaterial; entonces la vida biológica sería una emergente sistémica de este intercambio entre diferentes densidades de la materia. Afortunadamente, el Seth Material se expone con mayor profundidad, y se afirma la capacidad de pasar de un camuflaje o sistema (densidad de la materia) a otro, pero denominándoles como Puntos Coordenados:
Existen puntos de coincidencia en los que, en ciertas condiciones, se puede pasar de uno de estos sistemas a otro. Por supuesto, no necesariamente están separados en el espacio que ustedes conocen. Estos son los llamados Puntos Coordenados, donde un camuflaje se fusiona con el otro. En su sistema, algunos de ellos son geográficos pero en todos los casos se necesita una sintonización preliminar de la conciencia. Tales pasajes sólo pueden hacerse en experiencias fuera del cuerpo. Todo individuo tiene acceso en sus sueños a la información que poseen Los que hablan [Wanderers, aquellos con capacidad de despertar a otros]. Existen estados adyacentes de conciencia que ocurren dentro de los patrones de sueño y que sus electroencefalogramas no pueden detectar, "corredores" adyacentes a través de los que viaja vuestra conciencia.
Ahora bien: estos Puntos Coordenados activan por sí mismos el comportamiento de los átomos y las moléculas al igual que, por ejemplo, el Sol ayuda al crecimiento de las plantas. Las coordenadas activan el comportamiento generador de átomos y moléculas, y amplían en gran manera su capacidad de cooperación, es decir, su tendencia a agruparse en organizaciones y grupos estructurales. Los Puntos Coordenados magnifican o intensifican el comportamiento, la espontaneidad latente inherente a la materia física. Actúan como generadores psíquicos, impulsando a la forma física lo que aún no es tal.
Callanish emplazado en una
zona "ventana."
Parece que hemos dado con algo sustancial: la infraestructura edilicia del Cosmos aparenta anclarse y sostenerse a través de estos extraños vínculos o puntos; la idea de que existan zonas geográficas donde estos puntos posean ciertas implicancias en sus alrededores nos relaciona con las Líneas de Ley y las Zonas Ventana; estas líneas explicarían la ubicación de los círculos de piedra como Stonehenge o Callanish, y las estructuras piramidales como la de Giza. Las Líneas de Ley fueron estudiadas por el prestigioso investigador Thomas Lethbridge y nuestro respetado Juan García Atienza cuando trazó la historia oculta del legado templario:
Si nos molestamos en escarbar hasta su estructura primigenia en estos caminos equívocos seguidos por los ocultistas de todos los tiempos, nos encontramos con que, en todos ellos, hay una meta específica que domina a todas las demás: la victoria sobre los conceptos aparentes del tiempo. Y esta victoria, cuando se consigue, se alcanza por medio de dos vías que, en el fondo, no son más que una: la experiencia directa y el conocimiento. En ambas, tendientes a un mismo fin, la elección depende del individuo, según dominen en él las capacidades psíquicas o la fuerza intelectual.
Al final de ambas vías está el encuentro definitivo con una realidad distinta de las apariencias percibidas por los sentidos. Una realidad en la que estamos todos inmersos, pero a la cual las percepciones sensoriales confieren una visión engañosa.
Ahora bien, Atienza nos facilita adicionar una idea llamativa: estos puntos coordenados no son exclusivamente geográficos sino que pueden ser también temporales: ¿acaso el trazo ominoso de épocas apocalípticas y de cambio de era estará relacionado? Perseguiremos esta idea en la siguiente entrega.